Irlanda ha aceptado reformar la Constitución para liberalizar la legislación vigente, una de las más restrictivas y controvertidas de Europa, en el referéndum sobre el aborto celebrado este viernes, en la que la alta participación ha resultado clave para la rotunda victoria del “sí”, según los sondeos.
Aunque el recuento oficial comenzó este sábado a las 08:00 horas GMT, dos encuestas efectuadas a pide de urna por la cadena pública RTE y el diario “Irish Times” indican que una “abrumadora mayoría” ha tomado una decisión que los medios califican de “histórica”.
DURANTE LAS PRIMERAS 12 SEMANAS DE GESTACIÓN
Ambos sugieren que el 69 y 68 por ciento respectivamente, habrían respaldado la propuesta del Gobierno del partido Fine Gael, cuya reforma abriría la puerta a las terminaciones del embarazo sin restricciones durante las primeras doce semanas de gestación.
El ministro de Sanidad, el democristiano Simon Harris -uno de los grandes impulsores del cambio-, recibió con cautela las cifras, aunque confió en que hoy “en un país más compasivo, más bondadoso y respetuoso”, según escribió en Twitter.